Instalación de placas solares: pasos y duración

Proceso de Instalación de Paneles Solares: Tiempo y Etapas Clave

Cada vez más hogares y empresas en España apuestan por reducir su factura eléctrica y su impacto ambiental. La instalación paneles solares se ha convertido en una opción accesible, pero muchos desconocen cómo se lleva a cabo. Si te preocupa el tiempo que tomará o los pasos necesarios, este contenido resolverá todas tus dudas.

Aunque parezca complejo, el proceso de instalación solar está perfectamente estructurado. Desde la evaluación inicial hasta la conexión final, cada fase tiene un propósito claro. Conocerlas te ayudará a planificar mejor, evitar retrasos y asegurarte de que todo cumple con la normativa vigente.

1. Evaluación técnica y trámites previos

Antes de colocar el primer panel, hay que sentar las bases. Esto implica:

• Estudio de viabilidad: Un técnico analizará tu consumo energético, la orientación del tejado y las sombras que puedan afectar al rendimiento.

• Elección del tipo de sistema: ¿Autoconsumo con excedentes? ¿Aislado de la red? Esta decisión influirá en el diseño y los componentes necesarios.

• Gestión de permisos: Dependiendo de tu municipio, necesitarás una licencia de obras, autorización ambiental (para grandes proyectos) o un informe de impacto visual si vives en zona protegida.

En zonas como Galicia o Asturias, donde la nubosidad es frecuente, este estudio es crucial para dimensionar correctamente la potencia de los módulos. El plazo para esta etapa suele ser de 2 a 4 semanas, aunque varía según la complejidad del proyecto.

2. Montaje físico y conexión eléctrica

Una vez aprobados los permisos, llega el momento de la acción. Esta fase incluye:

• Preparación de la estructura: Se instalan soportes en el tejado o suelo para fijar los módulos. En cubiertas inclinadas, se usan rieles; en planas, estructuras elevadas con inclinación optimizada.

• Colocación de los módulos: Los paneles se fijan mecánicamente y se conectan entre sí en serie o paralelo, según el diseño.

• Instalación del inversor: Este equipo transforma la corriente continua generada en alterna, compatible con la red doméstica. Suele ubicarse en un lugar ventilado y protegido de la intemperie.

Un equipo profesional tarda entre 1 y 3 días en completar este paso. Sin embargo, en viviendas con techos frágiles o accesos complicados, podría extenderse.

3. Pruebas, legalización y puesta en marcha

El final del camino implica asegurarse de que todo funcione correctamente:

• Inspección técnica: Un electricista homologado revisa la instalación para garantizar que cumple el Reglamento Electrotécnico de Baja Tensión (REBT).

• Registro en Industria: Obligatorio para sistemas mayores de 10 kW. Incluye la presentación de la memoria técnica y el certificado de fin de obra.

• Comunicación a la distribuidora: Si vas a verter excedentes a la red, firmarás un contrato de compensación. Desde 2023, este trámite se realiza digitalmente en menos de 48 horas.

Tras la legalización, solo queda activar el sistema. La mayoría de los inversores modernos incluyen apps para monitorizar la producción en tiempo real. En total, desde el primer contacto hasta la primera factura ahorrada, el proceso completo puede durar entre 2 y 6 meses, dependiendo de la burocracia local.

Dar el paso hacia el autoconsumo no es solo cuestión de comprar placas y colocarlas. Requiere planificación, paciencia y conocimiento de las etapas clave. Pero los beneficios –desde ahorros económicos hasta independencia energética– compensan con creces el esfuerzo. Recuerda: elegir una empresa instaladora certificada y con experiencia acortará plazos y evitará dolores de cabeza.