Las instalaciones fotovoltaicas aisladas de red se realizan dónde la red eléctrica no llega por cuestiones técnicas (zonas de montaña de difícil acceso) o bien por imposibilidad económica (resulta muy caro llevar la línea eléctrica hasta la vivienda).
En este tipo de instalaciones es obligatorio disponer de baterías para acumular la energía durante el día y poder usarla por la noche cuando no hay producción solar, además también es necesario tener un motor para tener garantía de suministro ante largos períodos sin sol, como puede pasar durante los días de invierno.
Principales aplicaciones de la fotovoltaica aislada:
En la Comunidad Valenciana, para PARTICULARES este tipo de instalaciones cuentan con una deducción sobre la cuota íntegra del IRPF de hasta un 20% sobre el tramo autonómico para las inversiones realizadas en equipos e instalación, con una base máxima de cálculo de la deducción de 8.000 euros (inversión), IVA incluido.
En el caso de EMPRESAS, existen subvenciones a fondo perdido de hasta e 45% del coste de la instalación.